Vitamina c liposomal

efecto superior de la vitamina c liposomal en los trastornos de la presión arterial

La vitamina C es un nutriente esencial para la vida. Esta vitamina tan frágil debe su nombre a la enfermedad causada por su carencia, el escorbuto, que solía afectar a los marineros de largas distancias privados de alimentos frescos. Esta enfermedad ya era conocida 1500 años antes de Cristo y fue descrita por Aristóteles. Por tanto, ¡el descubrimiento de su importancia no es nada nuevo!

La vitamina C en la encrucijada de la regulación metabólica

Necesitamos cantidades suficientes de esta sustancia vital cada día, ya que es esencial para el buen funcionamiento de numerosas actividades metabólicas, que aseguran la homeostasis y el equilibrio del organismo.

A diferencia de la mayoría de los mamíferos, los seres humanos no tenemos la capacidad de sintetizarla. Tampoco somos capaces de almacenarla a largo plazo. Por eso es tan importante asegurarnos de que obtenemos suficiente vitamina C cada día a través de nuestra dieta y suplementos.

La vitamina C, también conocida por su nombre químico "ácido ascórbico", desempeña muchas funciones en el organismo:

  • Es un importante antioxidante, que protege las células contra el estrés oxidativo
  • Interviene en el metabolismo del hierro, facilitando su absorción
  • Ayuda a regenerar la vitamina E en su forma reducida
  • Es bien conocido por su acción de refuerzo de la inmunidad
  • Sobre todo, es un cofactor en las reacciones enzimáticas
  • Favorece el metabolismo energético
  • Reduce la fatiga y la pérdida de energía

Las necesidades diarias de nuestro organismo son importantes, pero aún más cuando estamos enfermos.

La forma liposomal, muy útil para potenciar la actividad de la vitamina C

La vitamina C es una vitamina extremadamente frágil, que no tolera el calor (por lo que desaparece cuando se cocina, especialmente en agua). el 90% de la vitamina C se absorbe en el intestino. Por encima de 180 mg/día, su absorción disminuye porque el mecanismo se satura. Aunque la necesidad de vitamina C del organismo es muy alta, su suplementación eficaz sigue siendo complicada: es frágil, se daña con facilidad y sólo se absorbe en pequeñas cantidades.

La vitamina C en forma liposomal ofrece un avance sin precedentes en la nutrición celular. El liposoma es una microesfera de fosfolípidos en la que se pueden encapsular principios activos. Esta forma bioquímica específica protege el ácido ascórbico a lo largo del tracto digestivo, preservando su integridad y aumentando significativamente su biodisponibilidad. De hecho, este preparado lipídico, de naturaleza similar a la membrana que compone cada una de nuestras células, adquiere una capacidad de penetración única gracias a la liposomación. La vitamina C liposomal llega así al corazón de la célula, verdadera sede de la nutrición.

Vitamina C liposomal, la forma más activa en la regulación de la hipertensión

Aunque los efectos de la vitamina C sobre el cáncer y la inmunidad son bien conocidos, existen otras áreas en las que esta preciada vitamina puede ser de gran utilidad.

Es el caso de la regulación de un trastorno muy extendido, la hipertensión. Un estudio publicado en enero de 2020 en el IJMS (Iranian Journal of Medical Sciences) compara la eficacia de la forma liposomal de la vitamina C (ácido ascórbico) con la forma no liposomal más tradicional en la regulación de la hipertensión y la modulación de la presión vascular.

El objetivo de este estudio en modelo animal era comparar los cambios antihipertensivos y vasculares inducidos por la vitamina C convencional y la vitamina C liposomal. Los principales criterios utilizados para evaluarlo fueron la medición de la presión arterial sistólica y la frecuencia cardiaca. En comparación con la forma no liposomal, la forma liposomal se asoció con mayores efectos sobre la presión arterial final. El ácido ascórbico liposomal mostró actividad relajante a concentraciones significativamente más bajas.

Este estudio demuestra que la forma liposomal tiene ventajas innegables sobre las formas convencionales de vitamina C, aumentando la biodisponibilidad y la actividad de esta preciada vitamina.

Estos resultados confirman estudios anteriores sobre los beneficios de las formas liposomales en términos de nutrición celular.

Khalili A, Alipour S, Fathalipour M, et al. Formulaciones liposomales y no liposomales de vitamina C: Comparación de la actividad antihipertensiva y modificadora vascular en ratas hipertensas renovasculares. Iran J Med Sci. 2020;45(1):41-49. doi:10.30476/ijms.2019.45310

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